He pedido peras al olmo. Las saboreo. Son deliciosas (IG)

jueves, junio 29

Recreo, después.
Lo único permanente: la falta de concentración.
Cuadros blancos en paredes blancas
es todo tan limpio el mundo de los ricos
y tan prolijo.
Soy mi villa mientras cruzo los pasillos
que conducen a las salas del confort.
Si quisiera quedarme, mi ropa huiría
desnudarme tampoco lo resuelve,
llevo el pelo atado con una gomita de mucama
(no de estudiante o colegial)
debería cortarlo, comprarme zapatos
hacer el curso de Cómo casarse bien
y Cómo maquillarse para salir,
evocar las caídas del caballo cada día
despertarme con las botas puestas,
los estribos perdidos.