He pedido peras al olmo. Las saboreo. Son deliciosas (IG)

viernes, abril 15

¿Desde cuando en un sueño de los buenos existe la realidad?

La chica entra al consultorio. El médico está más bueno que comer con la mano y (a mi gusto lo mejor que pasa en estos sueños) el caballero es un desconocido. O sea, dentro y fuera del sueño, nunca ha visto esa cara.

El argumento es mezcla de porno sencilla y juegos de la infancia.
Ella se sienta en la camilla, se saca la ropa, para que él la revise, él la toca, también se desviste, y en el exacto momento, justo antes de pasar ella lo detiene y le dice: ¿sin forro? ni en pedo.
Así, literal.
Él se levanta como si se fuera ofendido o a buscar algo. Hay un momento de indecisión, ella se da cuenta que él no va a volver y se despierta.